¿Estás pensando en comprar una alfombra pero aún no estás seguro de si realmente la necesitas? Estamos aquí para decirte que sí. Sí, la necesitas. Y no lo decimos tan solo porque vendamos alfombras, si no porque creemos que son muy importantes para crear hogar.
Cuando pensamos en una alfombra, nos vienen cosas positivas y alguna que otra negativa a la cabeza. Por supuesto las negativas tienen fácil solución 😉 Y lo positivo compensa mucho más que lo negativo. Empecemos.
Las alfombras son conocidas por alegrar el espacio, crear ambiente, mejorar el confort o proteger tu suelo. Por supuesto, las razones son muchas más (aquí te traemos 5), así que sigue leyendo para descubrir las razones más importantes de por qué las alfombras son una inversión inteligente.
Si te preocupas por el diseño interior o exterior de su casa, debes saber de la importancia de una alfombra impactante para lograr un ambiente agradable y acogedor. Para sacar el máximo partido a tus habitaciones, debes pensar en el estilo de decoración general y en el patrón de colores cuando vayas a comprar tu nueva alfombra.
Si te preocupas por el diseño y la estética de tu hogar, de tu jardín o terraza, debes tener en cuenta que la alfombra es una pieza fundamental para crear un ambiente agradable, decorativo y acogedor. Normalmente, la alfombra siempre se elige en último lugar, una vez ya tenemos claros los muebles, sofás, etc. A partir de aquí, basándonos en la decoración que hemos elegido, comenzaría el proceso de selección de la alfombra que necesitas.
Alfombra de color liso, de estilo geométrico, con un dibujo abstracto, con una paleta de colores vivos… Depende del conjunto de nuestra estancia podremos elegir entre una gran variedad de diseño y colores. Con respecto a los colores, un consejo muy extendido es basarnos en la regla del 60-30-10. Es decir, que el color elegido para casa sea el mismo en un 60% (a poder ser color neutro), un 30% de otro color (normalmente un color secundario) y por último un 10% del resto de decoración de colores a elegir.
En el caso de las alfombras debido a la superficie que ocupan y lo que pueden llegar a destacar, lo normal es elegir una alfombra que combine el 60-30, es decir, sobre una gama de colores neutros de base, escoger una alfombra que combine detalles en otros colores combinados con ese 30%.
Aunque para gustos, los colores, si no, que se lo digan a los amantes de la decoración boho-chic, que se caracteriza por la mezcla de colores y estilos decorativos.
Por ejemplo, si estás viviendo de alquiler, a veces no te permiten cambiar el color de tus paredes o el suelo. Además,los muebles en tonos oscuros pueden hacer que una habitación parezca sombría o menos espaciosa. Para solucionar esto, una alfombra puede crear una apariencia estética inigualable.
Para espacios pequeños, una alfombra puede producir un efecto de amplitud. Para ello con alfombras de colores lisos o de tonos neutros, podemos conseguir mucha más luminosidad. Las alfombras de tejido plano también son una muy buena opción. Al ser más ligeras y de apariencia más sencilla, ayudan a conseguir una mejor sensación en la estancia.
Para ambientes más espaciosos o diáfanos, una alfombra ayuda a delimitar una zona en concreto, por ejemplo, la zona de sofás o la zona de la mesa del comedor. De esta forma ayudamos a crear un ambiente más confortable, al sentirnos más recogidos.
Es bien sabido el papel de de las alfombras a lo largo de la historia, o bien se utilizaban para crear ambientes señoriales aportando caché o estatus donde se colocaban o bien se tejían para proteger del frío del suelo a quienes las utilizaban. Puede que también una mezcla de ambas.
Las alfombras, sobre todo las alfombras de lana, son las que más aíslan térmicamente, tanto del frío como del calor. El concepto más extendido entre la gente es que una alfombra actúa como barrera para impedir el contacto con el frío del suelo. Esto es correcto aunque también aíslan de otra forma.
Las alfombras ayudan a conservar la temperatura ambiente, es decir, que tanto si tenemos encendida la calefacción, como el aire acondicionado, las alfombras ayudan a reducir el consumo de energía eléctrica al conservar mejor la temperatura de nuestro salón o habitación. Con menos potencia eléctrica es más fácil mantener la temperatura ambiente. Por esto también es buena idea mantener las alfombras en verano 🙂
En cuanto al aislamiento acústico, con las alfombras también conseguimos, sobre todo, dos beneficios. El reducir la reverberación en la estancia donde se coloque, y sobre todo, evitar que el sonido traspase la alfombra y llegue a otro lugar.
Por ejemplo, el caso más conocido de las alfombras como elemento aislante del ruido, es el de las alfombras de pasillo en hoteles. Siempre se han colocado ya que reducen mucho la transmisión del sonido que producen el paso de las maletas o las conversaciones de los huéspedes. Como un objetivo del hotel es conseguir el mayor confort posible para sus clientes, toman la sabia decisión de colocar alfombras o moquetas en pasillos y habitaciones.
También, el evitar que traspase el ruido a otros lugares, puede ser muy beneficioso, no tanto para nosotros, pero sí por ejemplo para nuestro vecino de abajo. O a caso no agradecerá que tengamos una alfombra en la zona de sofás, en el cuarto de juegos de los niños o en el pasillo. Por supuesto que sí 🙂 Por lo tanto, piensa en añadir una alfombra a tus habitaciones si quieres reducir la cantidad de ruido de ambiente o molesto para los demás.
Si en nuestro hogar tenemos colocado un suelo de tarima de madera natural, una opción para protegerlo en las zonas de mayor paso es utilizar alfombras. El coste de instalación y mantenimiento de la madera natural suele ser bastante alto, por lo que cuanto más se cuide, mucha más durabilidad conseguiremos.
Las alfombras suelen ser resistentes al uso, con una estructura o entramado que permite proteger el suelo frente a las pisadas, tacones o incluso juguetes de los más peques de la casa. También, frente a los líquidos, puede actuar como una barrera evitando que penetren en la madera deteriorándola antes de lo debido.
Además, si eres de los que prefieren alfombras con un fácil mantenimiento, las alfombras de exterior/interior son las más adecuadas, ya que se pueden mojar, lavar, barrer y aspirar con mucha facilidad.
Ten en cuenta que los suelos de madera en zonas de mucho tránsito como el hall, pasillos o salidas a la terraza o jardín son más propensas al desgaste que en otras estancias de la casa, ya que suele ser donde más suciedad se acumula. Una alfombra de entrada o felpudo, o una alfombra de pasillo protegerá de maravilla el suelo, y por supuesto, ayudará a decorar tu hogar.
Esperamos que estos consejos te ayuden a decidirte por una de nuestras fantásticas alfombras, o si quieres darle un aire nuevo a tu decoración, también podemos ayudarte a conseguirlo 🙂
Estaremos encantados de ayudarte a elegir tu próxima alfombra 🙂
